¡Qué jornada tan especial y significativa han vivido celebrando el Día de los Fundadores! Es admirable cómo se mantiene viva la memoria y los valores de Marcelo y Celia, quienes dejaron un legado tan importante a través de la Congregación de Esclavas del Divino Corazón.
Desde la catequesis para explicar a los más pequeños el significado de este día, hasta actividades tan bonitas como compartir juguetes y trabajar en el cuento emocional sobre tristeza y alegría, todo estuvo cuidadosamente pensado para transmitir valores fundamentales como la generosidad, la empatía y la gratitud. La merienda de los Ochios y la chocolatina, por supuesto, seguramente también dejó una huella dulce en los recuerdos de todos.
Es hermoso que, como los mayores de 5 años, hayan dibujado a los fundadores y escrito sus nombres, involucrándose activamente en esta celebración. ¡Sin duda fue un día lleno de aprendizaje, alegría y comunidad!
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